Tensión diplomática entre Perú y Chile... otra vez

Hace algunos días, mientras los presidentes de Perú y Chile se encontraban reunidos en Singapur con ocasión de la Cumbre de la APEC, el gobierno peruano hizo público la captura de un espía que habría robado información de defensa del Perú para venderla a los servicios de inteligencia chilenos.

El suboficial técnico Víctor Ariza Mendoza, especialista en inteligencia de la FAP (Fuerza Aérea del Perú) habría sustraído importantes informes de inteligencia que comprometen la seguridad y defensa del país, y las habría vendido a Chile, a cambio del cual habría recibido entre 3 mil y 8 mil dólares mensuales, desde el año 2002, dependiendo de la calidad de la información entregada. Este militar habría sido captado por los sistemas de inteligencia chilenos durante su estancia en la embajada peruana en Santiago como agregado militar, cargo que ocupó hasta 2004. Sin embargo, sus viajes con destino a Chile fueron constantes en los años posteriores.

Como es de esperar, las reacciones en ambos países no se hicieron esperar. El presidente García suspendió su agenda en la Cumbre de Singapur y voló inmediatamente hacia Lima, evitando de esta forma encontrarse con la Presidenta Bachelet, con quien tenía concertada una cita bilateral en esta cumbre. El presidente García necesitaba contar con toda la información de primera mano y, además, dar una señal de desaprobación y de acto inamistoso por parte de nuestros vecinos del sur.

Mientras tanto, el gobierno peruano, por medio del Canciller José Antonio García Belaúnde, y del ministro de Defensa, Rafael Rey, han hecho público los detalles y las reflexiones del caso. Los medios peruanos también han aireado este tema, surgiendo la discusión sobre los delitos con los que debe acusarse al espía, que van desde traición a la patria hasta espionaje.

Declaración del Presidente García:




En Chile, el silencio sobre este complejo asunto era la respuesta inmediata. Hasta que hace un par de días, algunos funcionarios y militares del país del sur han salido a manifestarse en sus medios, y ayer tuvimos finalmente una respuesta del Canciller chileno Mariano Fernández a las declaraciones realizadas el día anterior por el Presidente García, en Lima, en la que niega todo y alude a una supuesta campaña mediática peruana para mostrar al país sureño como beligerante. Quizá el Señor Bermejo no ha revisado la lista de compras de armamento de Chile.



Entretanto, el suboficial Ariza es investigado por tres delitos: traición a la patria, atentado contra la seguridad nacional y lavado de activos en agravio del Estado, por lo cual se ha levantado el secreto de las comunicaciones. A la fecha, según los medios peruanos, ha sido encarcelado en el penal de máxima seguridad de Piedras Gordas, bajo estrictas medidas de seguridad y vigilancia permanente para salvaguardar su integridad y su vida. También ha trascendido que habrían 3 cómplices más en esta red de espionaje: el técnico de primera FAP Víctor Buendía Rodríguez, y los suboficiales FAP Justo Ríos Aguilar y Omar Flores Arrazabal. Según los medios, Buendía Rodríguez habría sustituído a Ariza Mendoza en la agregaduría militar en Santiago de Chile durante 2004, siendo desconocido su paradero actual, entretanto que Ríos Aguilar habría salido del país con rumbo a Estados Unidos días después de la detención de Ariza Mendoza.

Finalmente, la prensa chilena ha informado con gran detalle sobre este tema.

CNN Chile sobre el caso de espionaje